Convivencia con comunidades

Culturas locales y grupos indígenas

Turismo comunitario de 1 a 5 días

Bolivia, clavada en el centro de América del Sur, es precisamente por su ubicación geográfica un destino único. Es un destino para especialistas, exclusivo en el mejor sentido de la palabra, y es que las barreras que lo hacen tan especial tienen que ver con una suerte de sensibilidad que se requiere para disfrutar no sólo de paisajes excepcionales, sino de la simplicidad del modo de vida de sus habitantes.

Independientemente de algunos highlights como el Salar de Uyuni, el Lago Titicaca y el Parque Madidi, lo más entrañable de Bolivia son los detalles individuales de sus diferentes rincones y personas.

La topografía de Bolivia brinda enormes posibilidades de realizar actividades turísticas, desde grandes aventuras por las montañas hasta caminatas por la savana donde se encuentran comunidades indígenas, esta es la forma de conocer Bolivia "desde adentro". Te invitamos a conocer cómo es la vida en las comunidades indígenas de las zonas rurales de Bolivia, experimenta tours dentro de pequeños museos y sitios arqueológicos que revelan culturas milenarias rodeados de los más impresionantes Parque Nacionales, reservas naturales que albergan una enorme cantidad de biodiversidad.

Visitar comunidades indígenas le permite, por un lado, adentrarse a lo más profundo de la realidad local, visita paisajes extraordinarios que están definitivamente fuera del turismo convencional y, paralelamente, hace su parte en la tan necesaria dinámica de transferencia de algunos recursos económicos de quienes más tienes a quienes con más carencias viven.

 

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ECOALBERGUE SAN MIGUEL DEL BALA - PARQUE MADIDI


Desde Rurrenabaque a sólo 45 minutos en bote, río arriba, en la orilla derecha se encuentra el albergue comunitario de San Miguel del Bala, el más nuevo de los emprendimientos ecoturísticos comunitarios de la zona. 

La ventaja de este albergue es, precisamente, la cercanía que éste tiene con Rurrenabaque, se lo puede visitar inclusive si se va a la zona por el día o si sólo se tiene una noche de pernocte.

Su oferta es variada en cuanto a actividades relacionadas a paseos en la selva con énfasis en observación de aves, monos, huellas de animales grandes y plantas y la opción de compartir con los miembros de la comunidad de San Miguel, condiciones que invitan a una larga estadía.

En San Miguel del Bala se pueden hacer caminatas por distintos senderos de la selva, observación de aves, visitar una linda cascada y compartir con la comunidad de San Miguel del Bala.

El albergue cuenta con siete cabañas con baño privado, ducha caliente y luz eléctrica por las noches y un par de cabañas con baños comunes.

Ofrece un Centro de Interpretación donde se realizan actividades sociales, de descanso, seminarios, el mismo dispone de hamacas, juegos de mesa y libros de la cultura tacana. Allí se realiza la exposición y venta de artesanía típica.

Una cabaña grande y cómoda ha sido destinada como cocina y comedor, atiende no sólo a los huéspedes del albergue, sino a los visitantes que van por el día a San Miguel. El albergue cuenta además con un área de camping.

La comunidad de San Miguel ha sido la única en todo el país que ha pedido ser parte de un área protegida, en este caso del Madidi; por su proximidad, comparte las características de flora y fauna al interior del Parque, lo que permite a sus guías realizar guiajes interpretativos con una visión tacana.

San Miguel del Bala ofrece cinco programas diferentes que varían en precio de acuerdo a su duración y contenido para niños, grupos y programas especiales.


RED DE HOTELES  TAYKA

Si bien la zona ha sido visitada turísticamente desde hace casi 30 años, la infraestructura hotelera era, hasta hace muy poco tiempo, muy pobre. Esta situación se ha revertido en parte gracias a diversas inversiones privadas como la red de Hoteles Tayka que es un emprendimiento mixto, vale decir que los hoteles han sido construidos con financiamiento a fondo perdido y por otra parte en condiciones favorables. Las comunidades, donde se han erigido los hoteles, han establecido un convenio con la Fundación “Prodem” para que ésta administre la red durante quince años y, posteriormente, la gestión pase enteramente a manos de la comunidad.

Los tres hoteles en funcionamiento son el Hotel de Sal, el Hotel de Piedra y el Hotel del Desierto. El primero, en la parte norte del salar en la localidad de Tahua, el segundo al sur del mismo, en la localidad de San Pedro de Quemes y el tercero situado al borde de la Reserva Eduardo Avaroa, a unos 40 minutos en automóvil de Laguna Colorada, en un punto llamado Ojo de Perdiz, los dos primeros ubicados a una altura de 3.700 msnm, mientras que el tercero está a 4.600 msnm.

Los tres cuentan con habitaciones cómodas, con baño privado y agua caliente. Los ambientes comunes son espaciosos y han sido diseñados arquitectónicamente de acuerdo a la estérica del lugar. El primero, siguiendo el modelo del Hotel de Sal, está hecho de bloques de ese material, para el segundo se ha utilizado el material pétreo y la técnica de las construcciones coloniales del lugar. Posiblemente un defecto de estos hoteles son sus ambientes demasiado grandes y difíciles de ser calentados y, especialmente en la temporada invernal, se sienten las bajas temperaturas.

Es factible disfrutar de una visita a los tres hoteles si, partiendo al amanecer desde La Paz se llega a buena hora al Hotel de Sal en Tahua. Para este recorrido se debe usar la ruta que sale de Oruro en dirección a Quillacas y de ahí a García Mendoza, luego se toma el camino que bordea el volcán Thunupa por su cara norte. El segundo día puede ser utilizado para visitar el Salar en su plenitud, incluyendo la isla Inca Huasi y algunos de los atractivos de las laderas del Thunupa, por ejemplo el cementerio prehispánico o la llamada Gruta de la Galaxia y pernoctar en el Hotel de Piedra. A la jornada siguiente se puede seguir en dirección al sur, visitar las lagunas Honda, Hedionda y Cañapa, y pernoctar en el Hotel del Desierto, para luego, llegar a Laguna Colorada, los géiseres y Laguna Verde y continuar más tarde a San Pedro de Atacama en Chile.

Un viaje por esa zona, ya sea siguiendo la ruta mencionada o retornando desde Laguna Verde hacia el norte, debe hacerse en una movilidad todo terreno. En Uyuni hay una serie de empresas, pequeñas y grandes, que ofrecen esos servicios. Ir por la zona en coche propio, y sin alguien que conozca el lugar, es arriesgado, la señalización es deficiente y un GPS no ayuda, principalmente porque las disyuntivas que se pueden dar en Bifurcaciones no tienen relación con la dirección sino con el estado de una senda u otra donde se puede caer en trampas como los ojos de agua. Por lo que es recomendable tomar los servicios locales por la experiencia y las redes de ayuda con que cuentan quienes viven en la zona.

SALAR DE UYUNI Y RESERVA DE FAUNA ANDINA EDUARDO AVAROA

Con una superficie de unos 10000 km2 y situado al suroeste de Bolivia, el salar de Uyuni es el más grande del mundo. Se estima que contiene un estrato de 6 metros de sal común muy pura. A una altura de 3700 msnm, en el oeste de Uyuni, se extiende como una enorme llanura total plana y blanca de colosales dimensiones. Las orillas del salar tienen muchas ensenadas grandes y son en general muy fangosas.
Las enormes cantidades de sal se rescatan ante todo en el pueblo de Colchani. Primero se amontonan pequeñas colinas de sal para su deshidratación, luego la sal es llevada al pueblo donde se seca, se le añade yodo y se la embolsa de una manera por demás primitiva, todo dentro de un trabajo completamente familiar.

Uno de los puntos más visitados dentro del Salar es la famosa Isla Huasi o Pescado llamada así por tener, a la distancia, la forma de un pez. En este promontorio se halla un nutrido bosque de cactus de gran tamaño.

LAGUNA COLORADA

Otro gran atractivo es la Laguna Colorada situada dentro de la Reserva Nacional de Fauna Andina Eduardo Avaroa, en el altiplano potosino cerca de la frontera con Chile. La laguna tiene una superficie de 60 km2 y alcanza alrededor de 80 cm de profundidad.

El color rojo de sus aguas se debe a la presencia de ciertas algas y bacterias que tienen la característica de cambiar con la temperatura y a determinadas horas, siendo de rojo más intenso cuando la radiación solar es más fuerte (mediodía) pudiendo pasar a un rojo morado. Cerca al agua se ven colinas de bórax que parecen estar flotando en las coloradas aguas. Posiblemente allí han anidado la mayor concentración de flamencos en Sudamérica.

Es una incógnita como las aves pueden sobrevivir las extremas temperaturas de -20 ºC y menores. A una altura de más de 4.200 msnm, se encuentra tres tipos diferentes de flamencos en la laguna. Todos pueden vivir uno al lado del otro porque sus picos son diferentes y cada tipo de flamenco se alimenta de otro tipo de algas.

RED DESIERTO DE LOS LÍPEZ

En el último rincón de Bolivia, en la zona de los Lípez, frente a la famosa Laguna Verde y a los pues del volcán Licancabur, los comunarios de Quetena Grande han construido un albergue de montaña que es la única opción de acomodación en esa parte del circuito de las lagunas y desiertos de Sud Lípez.

ALBERGUE DE MONTAÑA DE LAGUNA VERDE

Administrado por los Prestadores de Servicios Turísticos Quetena Grande, cuenta con cuartos dobles y triples y puede albergar hasta 18 personas por noche. El albergue es ideal para quienes pretenden escalar el Licancabur, los comunarios de Quetena ofrecen sus servicios como guías especializados y porteadores.

El albergue es también una opción para quienes hacen el circuito de las Lagunas y pretenden regresar a Uyuni. La ventaja es que así se puede dividir el tiempo que toma este circuito de aproximadamente 850 km, de una manera más conveniente, vale decir, un primer día desde el Salar hasta San Agustin, o San Juan y pernoctar allí, luego se puede seguir el segundo día por las lagunas Hedionda, Chiarkhota, y Colorada hasta la Laguna Verde, donde se puede pernoctar. Al día siguiente el retorno podría hacerse desde la Laguna Verde, pasando por Polques, Quetena Grande, Quetena Chico, Villa Alota, Culpina K, San Cristóbal hasta llegar a Uyuni.

BALNEARIO DE POLQUES

Donde los visitantes pueden bañarse. Cuenta con una cafetería que brinda servicios de alimentación previa consulta a administración, además de un pequeño almacén de ventas (dulces, galletas, refrescos, etc.). Por el momento, la cafetería existente alquila mesas con y sin manteles a las operadoras que van con sus cocineras; en el lugar se cuenta con un baño ecológico público.

ALBERGUE COMUNITARIO QUETENA CHICO

La comunidad de Quetena Chico ha construido un albergue que ha sido habilitado con todo el mobiliario necesario. Este albergue comunal tiene una capacidad para recibir hasta de 20 personas. Cuenta con duchas, baños y electricidad gracias a un generador que está encendido hasta las 10 p.m.

Durante su estadía en este albergue se podría aprovechar en visitar el “Centro de interpretación Ch’aska” ubicado frente al albergue comunal, allí el visitante encontrará información organizada en varias salas dedicadas a temáticas diferentes: trabajos de investigación realizados por la NASA, salas de ecología, biología, plantas medicinales, agricultura andina, geología y mineralogía de la región.

Otro servicio que se puede encontrar, previa reserva en el Centro de Interpretación, es el servicio de cafetería (desayuno, almuerzo y cena), a cargo de señoras de la comunidad quienes recibieron capacitación en gastronomía. La capacidad de esta cafetería es para 25 personas.


El Albergue Comunitario de Tomarapi es una de las joyas dentro del Turismo Comunitario. Se encuentra en la localidad de Tomarapi en el Parque Nacional Sajama.

Desde La Paz, el viaje a Tomarapi es un paseo extraordinario por el Altiplano boliviano. Quien pueda permitirse un viaje en transporte privado, disfrutará de una amplia gama de ofertas tanto culturales, como arqueológicas y, ante todo, paisajísticas. La ruta está asfaltada y es, en su primera etapa, la carretera que une a La Paz con Oruro. En el kilómetro 58 es recomendable hacer una parada cultural, se trata del pueblo de Calamarca y su Iglesia, que contiene una de las series de cuadros coloniales más importante de Bolivia: los Arcángeles de Calamarca.

En el Kilómetro 70, en Villa Loza, se puede hacer una parada en uno de los puntos de venta mejor surtido, con restaurante incluido, que hay en una carretera boliviana. En Patacamaya, el kilometro101 es donde se desvía tomando la carretera en dirección a Arica, Chile.

En el camino, alrededor del kilómetro 150, uno comienza a toparse con una serie de tumbas en forma de pequeñas torres, los llamados "chullpares". Estos se verán a lo largo de la carretera por unos cuantos kilómetros. Se trata de construcciones funerarias hechas en adobe y que corresponden mayormente a los siglos XII y XIII d. C.

Finalmente, se avanza hasta el kilómetro 268, y allí se dobla hacia la derecha, doce kilómetros después uno llega al pueblo de Sajama, ya dentro del Parque Nacional. En Sajama es preciso inscribirse en el registro de visitantes del Parque, pagar la suma de 100 bolivianos por persona, luego seguir camino. Con un poco de suerte uno se topa con vicuñas, en el camino las llamas y algunas alpacas ya han hecho acto de presencia; 18 kilómetros más allá del pueblo de Sajama, llegamos a Tomarapi, el antiguo villorrio, hoy dominado solo por una bella iglesiecita y el albergue.

La característica especial de Tomarapi es que el albergue ha sido construido más o menos siguiendo el plano originas de las pequeñas casas del lugar. La estructura social comunitaria ha sobrevivido a la migración de las personas, principalmente porque los lazos se mantuvieron en torno a la tradición y a la fiesta patronal. 

En la administración de lugar participa un 80% de esa pequeña comunidad compuesta por tan solo treinta familias.

No quepa la menor duda de que pasar la noche en Tomarapi, cenar un rico menú con carne de llama en el comedor, con una fogata de fondo, es la culminación de uno de los días más bellos que alguien pueda tener en el Altiplano no lacustre. Tomarapi es también una gran alternativa para iniciar una ascensión a la montaña. En las cercanías hay aguas termales muy agradables, cuya infraestructura, vestidores, baños y un pequeño puesto de venta de refrigerios, se encuentra en operación: Wayna Sajama.


PARQUE NACIONAL SAJAMA

Debe su nombre a un huésped gigante que se tutea con las nubes, y que descansa profunda y sosegadamente a pesar de las bulliciosas voces de las aves y demás animales que merodean por este paraje de encanto. Hablamos del volcán Sajama, el pico más alto e imponente de Bolivia con 6.542 msnm, sin duda la mayor atracción del Parque, porque su figura seduce y encanta a cualquier visitante que se interne en esta maravilla de la naturaleza.

Para que la naturaleza no perderá a uno de sus hijos predilectos, el Estado Boliviano decidió protegerlo mediante la creación, en 1939, de un parque nacional, con una extensión de 100.223 hectáreas, ubicado en la Provincia Sajama del departamento de Oruro.

Sus valores naturales y culturales hacen de esta área una de las más importantes para la conservación en Bolivia, en la que se encuentra una extensión de bosques de queñua, el árbol que crece a mayor altura en el mundo (5.200 msnm).

La población del Parque reside en los pequeños poblados de Sajama y Caripe, ubicados a los pies de Sajama, y en numerosas estancias donde se encuentra el ganado que es pastoreado en tierras comunales.


Donde se encuentra un museo con piezas de cerámica fina de la cultura de Tiwanaku, la pieza más reconocida lleva el nombre de "El Señor de los Patos" destacada por su perfección y calidad artística comparada con piezas de valor histórico mundial.


El recorrido comienza en la población de Huatajata, después de 2 horas de viaje desde la ciudad de La Paz, desde Huatajata nos embarcamos en una lancha local para viajar por 1 hora a través del "Lago Menor" que forma parte del Lago Titicaca. Visita a la Isla Pariti y su museo, que cuenta con valiosos vestigios dejados en la Isla, como utensilios y herramientas. Investigaciones han permitido determinar que este sitio fue inicialmente ocupado por una civilización dedicada a la agricultura, la pesca, la alfarería y la explotación de los recursos naturales del Lago Titicaca.


Pacha Trek ofrece una experiencia diferente con agradables caminatas y estadías en comunidades tradicionales que conforman la ruta "Caminando con los Kallawayas", con paseos a través de místicos paisajes andinos realizados con guías locales quienes presentan sus culturas aymara y quechua. Involucra directamente a tres comunidades de la zona de Apolobamba. El producto es vendido por agencias de viaje con el transporte en coche privado desde La Paz y de Charazani a La Paz, incluye un pernocte en Charazani y tres en las siguientes comunidades: Qutapampa, Kaluto y Chacapari. Existe también la posibilidad de tomar el bus a Pelechuco y quedarse en Qutapampa para iniciar el recorrido y terminarlo en Charazani, desde donde se tomará el bus de retorno a La Paz.

Este recorrido implica un trekking por senderos de altura, y pernoctes en tres ocasiones sobre los 400n metros, pero indudablemente es el producto que más acerca al turista a la vida de las comunidades, sobre todo de las comunidades de pastores de la altura que se dedican a la crianza de llamas y alpacas. Los Albergues son muy simples. Se sugiere llevar un sleeping bag porque la higiene de las camas no es óptima aunque la comida está incluida en el paque3te es también aconsejable llevar víveres adicionales.

¿QUÉ ES LA CULTURA KALLAWAYA?

Es un grupo étnico de Bolivia que practica la medicina ancestral con ritos y ceremonias locales, reconocido por la UNESCO como Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.

APOLOBAMBA

El Área Natural de Manejo Integrado (AMNI) Apolobamba abarca una superficie de 483.743 hectáreas. Se encuentra ubicada en el noroeste del departamento de La Paz y constituye un mosaico de unidades que incluyen muestras representativas de ecorregiones, comunidades y especies de flora y fauna de singular importancia.
Apolobamba se creó con la finalidad de proteger ecosistemas altoandinos y una de las mayores poblaciones de vicuña del país. Su paisaje se caracteriza por un acusado gradiente altitudinal que comprende tanto ambientes altoandinos, como de puna y de bosque húmedo montañoso de los Yungas. El área forma parte del corredor biológico binacional Vilcabamba-Amboró, considerado el hotspot más diverso del mundo.
Se han registrado más de 800 especies de plantas, estimándose que podrían a llegar a 1800 incorporando especies probables de sitios no relevados. Se han listado 296 especies de vertebrados, entre las cuales se destacan varias especies amenazadas como la vicuña, el oso de anteojos o jucumari y endemismos restringidos al área protegida.


RESERVA NACIONAL ULLA - ULLA

La Cordillera de Apolobamba alberga a la Reserva Nacional Ulla - Ulla. Desde la Reserva es frecuente ver al cóndor, el ave voladora más grande del mundo, y su abundante vegetación atrae a llamas, alpacas, guanacos, y a la mayor población de vicuñas de Bolivia. Asimismo, el turista encontrará especies silvestres como el puma, la taruca, el oso andino, la hullata, el venado, entre otras.
Más de 12 mil descendientes aymaras reunidos en 35 comunidades, habitan la zona. Conservan costumbres y tradiciones ancestrales y se dedican, principalmente, a la crianza de ganado camélido (alpacas y llamas) y ovino.
Por último, la reserva ofrece un sinfín de posibilidades para la práctica del ecoturismo y de diversos deportes de aventura como la pesca deportiva, el andinismo, la caminata y otros.

Para llegar a este destino se recorren aproximadamente 360 kilómetros e, indudablemente, la manera recomendable de hacerlo es en un coche particular que tenga doble tracción y sea apto para todo terreno. El recorrido, a velocidad discreta, toma unas siete horas, pero se debe considerar además las innumerables paradas fotográficas que se harán en el camino.
Desde la ciudad de La Paz se toma la ruta hacia el lago Titikaka, al llegar a Huarina se toma el camino que lleva a Achacachi y se continua, pasando por Ancoraimes y Carabuco, hasta Escoma (km 190), lugar hasta el que llega el asfalto.

En el camino es ineludible visitar la iglesia de Carabuco, que tiene una de las decoraciones en fresco más importantes de Sudamérica. Esta iglesia fue construida por el príncipe indígena de la zona, el cacique Siñani, cuyos descendientes aún juegan un rol importante en la actual política boliviana.


Sampaya brinda al visitante la oportunidad única de convivir e interactuar con una comunidad originaria de Los Andes. A través de su Centro de Visitantes y sus dos senderos de trekking dirigidos por guías locales, le ofrece la posibilidad de comprender la cosmovisión de los aymaras, compartir ritos y tradiciones y experimentar la vida diaria de la comunidad.

Es una de las poblaciones más auténticas y pintorescas de la península de Copacabana por haber conservado la arquitectura y técnicas ancestrales de construcción en piedra. Desde sus laderas se puede ver la inmensidad de lago, la Isla de la Luna y la Cordillera Real, especialmente el macizo compuesto por los nevados Illampu y Ancohuma. Este paraje idílico tiene además la ventaja de estar muy cerca de Copacabana, a no más de 12 kilómetros de distancia, y de contar con un camino transitable durante todo el año.

Quien visita Sampaya puede hacerlo a pie por la ruta desde Copacabana a Yampupata, un camino que en su mayor parte va a lo largo de la orilla de lago y tiene una duración de tres horas. Este recorrido a la vez de entregarle vistas pintorescas del lago y la Cordillera, le permitirá acostumbrarse paulatinamente a las alturas de la región altiplánica.

Adicionalmente, este emprendimiento comunitario cuenta con un pequeño albergue que puede alojar hasta ocho personas con todas las comodidades, un restaurante para 24 personas y un centro artesanal.

El visitante tiene la posibilidad de realizar tours entre uno y dos días. Sampaya resulta una alternativa fantástica para quienes deseen tener una experiencia cultural vivencial comunitaria en el lago Titicaca.

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